- El CNRS alertó que en el año 2.100 se espera un aumento de la temperatura global de 6.5°C a 7 °C, esto superaría en más de un grado a las estimaciones precedentes.
- El carbón es uno de los combustibles fósiles que mas contribuyen a las emisiones de GEI y de otros contaminantes que generan impactos ambientales y a la salud humana.
- Según el Inventario Nacional del Sector Ladrillero Colombiano realizado por la CAEM, el carbón es uno de los combustibles mas empleados para la producción de ladrillo.
Hoy en día, se habla mucho a cerca del cambio climático. Los medios de comunicación, científicos y la ciudadanía muestran su preocupación e interés al respecto. A diario aparecen noticias, estudios y conversaciones en las que el cambio climático es el protagonista.
Un centenar de científicos del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS), con sede en Francia, alertaron que el calentamiento global en el año 2.100 será peor de lo que se esperaba, con un aumento de la temperatura global de 6,5 a 7 grados centígrados para ese año y superaría en más de un grado a las estimaciones precedentes.
El informe se basa en las simulaciones de varios escenarios socioeconómicos, desarrolladas por climatólogos, oceanógrafos, especialistas de la atmósfera y de cálculo, cuyas conclusiones contribuirán al sexto informe del Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC), anunciado para 2.021.
Colombia actualmente juega un papel fundamental en la geopolítica del cambio climático al ubicarse dentro de los 10 países con las mayores reservas de carbón y al ser el cuarto exportador de carbón a nivel mundial. El carbón es de los combustibles fósiles que más contribuyen a las emisiones de GEI y de otros contaminantes de gran impacto para la calidad del aire y afectaciones a la salud humana.
Ahora más que nunca hay que insistir en que estamos a tiempo, pero hace falta actuar con urgencia. Tenemos que trabajar en que las emisiones globales de CO2 se reduzcan a la mitad en el año 2030 y para ello es necesario disminuir en al menos dos tercios el uso del carbón para esa fecha.
Según el Inventario Nacional del Sector Ladrillero Colombiano realizado por la Corporación Ambiental Empresarial CAEM en el año 2.015, el carbón es uno de los combustibles mas empleados principalmente en la etapa de combustión en la producción de ladrillo. Adicionalmente, se identificó que a 2015 en el país existen 2.435 hornos dedicados a esta labor, distribuidos en hornos artesanales, intermitentes, semi continuos y continuos.
La producción ladrillera, al igual que incendios, quemas agrícolas, fábricas industriales y la quema de combustibles fósiles, produce carbono negro por la combustión incompleta. Este carbono negro es considerado un Contaminante Climático de Vida Corta (CCVC) debido a su relativamente poca permanencia en la atmósfera de algunas semanas o meses.
Según el Manual de Capacitación Sector Ladrillero en América Latina, elaborado por la Coalición del Clima y Aire Limpio CCAC, el carbono negro influye en el calentamiento global, porque sus partículas oscuras, al absorber la luz, emiten calor e incrementan la temperatura de la atmósfera. Su tiempo de permanencia en la atmósfera varía desde unos pocos días hasta algunas semanas, pero durante ese tiempo su potencial de calentamiento puede ser entre 460 y 1.500 veces más potente que el dióxido de carbono.
Según el Reporte 2.016-2.017 de la CCAC, reducir las emisiones de los contaminantes climáticos de vida corta es suficiente para frenar el calentamiento global proyectado por 0.5° C en los próximos 25 años. Esto podría ser logrado mediante la reducción de las emisiones de carbono negro en aproximadamente un 75% y las emisiones antropogénicas de metano por 25% para el año 2030.
Por lo anterior desde hace cinco años, la CAEM y con el acompañamiento del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Coalición de Clima y Aire Limpio, han venido implementando la Iniciativa Ladrillera de la CCAC “Mitigación del carbono negro y otros contaminantes de la producción de ladrillos” en Colombia, y gracias a este acompañamiento efectivo, las empresas ladrilleras colombianas han logrado reducir 340.600 toneladas de CO2, y ahorrar 1.018.000 MWh/año luego de que más de 300 empresas hayan invertido en un total aproximado de 32 Millones de USD en implementaciones en eficiencia energética. Esto, además, ha permitido el ahorro de 10.377.500 Millones USD.
Así mismo, Colombia continúa progresando en la sustitución de tecnologías de hornos artesanales con tecnologías mejoradas, eficientes y bajas en carbono. El Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible y el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo han estado trabajando con el sector del ladrillo para desarrollar una guía de mitigación para rastrear y certificar la contribución del sector a la reducción de los objetivos nacionales de emisiones de GEI.